Washington, D.C. – El congresista Raúl M. Grijalva hoy envió una carta a la Secretaria del Estado Hillary Clinton en la ocasión del Dia Internacional de las Mujeres destacando el aumento alarmante de violencia contra las mujeres en Latinoamerica e instandole a “hacer cumplir con los requisitos de derechos humanos todos las operaciones en el extranjero y los proyectos militares financiados por el Congreso, no sólo en México y Centroamérica, sino en todo el mundo.”

La carta informa que “se habían asesinados más que 50.000 personas y más que 250.000 personas se habían desplazados sólo en México desde 2009.  El Centro para los Derechos de Mujeres en Honduras registraron 210 asesinatos de mujeres en los primeros siete meses de 2011.  Hoy en día, un promedio de una mujer por día es asesinada.  En Guatemala hubieron registrados 40.000 casos de violencia contra las mujeres en 2010, y resultaron en condenas sólo un por ciento de estos casos. Me preocupa mucho este nivel de impunidad.”

Grijalva cita que la ayuda a las agencias militares y policiacas esta empeorando la situación potencialmente.  La Iniciativa de Mérida, que es el esfuerzo principal de los Estados Unidos para combatir la violencia relacionado al narcotráfico en México y Centroamérica, tiene la tarea de retirar 15% de su financiamiento si los paises recibiendo la ayuda faltan de progresar en cuatro áreas claves:  asegurando que se enjuicien a los soldados acusados de violaciones de derechos humanos en tribunales civiles; mejorando la contabilidad de la policía federal; haciendo cumplir con la prohibición de la tortura; y consultando con los grupos civiles sobre la estrategia anti-narcotraficante. A pesar de un nuevo informe de la organización mexicana de derechos humanos CENCOSque enseña que mas que 70% de los objetos en en los ataques contra los activistas humanitarios en México son mujeres, el gobierno de México ha recibido financiamiento completo de la Iniciativa de Mérida a la fecha.

“En un momento cuando el gobierno de los EEUU proporciona capacitación, equipo, y otro apoyo a las fuerzas de seguridad mexicanas y centroamericanas es cada vez mas urgente  investigar como estas medidas reforzadas de seguridad han contribuido a la violencia contra las mujeres en esta región” informó Grijalva en la carta. Se puede leer la carta entera en el enlace http://1.usa.gov/AApVCQ.  El texto de la carta se ve a continuación.

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Estimada Secretaria Clinton,

Mientras celebramos el Dia Internacional de las Mujeres y todos los avances sobresalientes que han hecho las mujeres en el nombre de la paz y la igualdad, reconozcamos que todavía queda muchísimo trabajo que hacer para respaldar a los campeones de los derechos humanos y de mujeres en lograr sus metas, particularmente en México y Centroamérica.

En el día 5 marzo 2011 le escribí que si no se cumplen con los requisitos de la Iniciativa de Merida, según la ley es obligatorio que se retiren el 15% de los fondos especificados.”  Ese programa, que es nuestro esfuerzo principal para combatir la violencia relacionada al narcotráfico en México, ha fallado de proteger aún los derechos humanos más básicos pero continua recibiendo financiamiento completo.  Se obliga al gobierno de los EEUU asegurar que la asistencia económica que enviamos a nuestros compañeros del orden público en el extranjero se enfoca en prevenir los abusos, mejorar las investigaciones, e impartir justicia.  Le insto con respeto a honrar el Día Internacional de las Mujeres a hacer vigorosamente el cumplimiento de los requisitos en todos las operaciones en el extranjero y los proyectos militares financiados por el Congreso, no sólo en México y Centroamérica, sino en todo el mundo.

Son diversas las activistas mujeres de los derechos humanos.  Son madres y hermanas buscando justicia para sus familiares desaparecidos o asesinados, mujeres indígenas organizandose contra el desplazamiento, jovenes abogando por los servicios de atención médica, y mujeres buscando justicia en los casos del homicidio de género y la violencia familiar.  Lamentablemente, estas mujeres valientes enfrentan tasas alarmantes de violencia en la lucha para los derechos de sus comunidades.  Los niveles de violencia en México y Centroamérica están intensificando y son particularmente preocupantes.

La violencia en la región ha aumentado a una velocidad alarmante.  Se habían asesinados más que 50.000 personas y más que 250.000 personas se habían desplazados sólo en México desde 2009.  El Centro para los Derechos de Mujeres en Honduras registraron 210 asesinatos de mujeres en los primeros siete meses de 2011.  Hoy en día, un promedio de una mujer por día es asesinada.  En Guatemala hubieron registrado 40.000 casos de violencia contra las mujeres en 2010, y resultaron en condenas sólo un por ciento de estos casos.  Me preocupa mucho este nivel de impunidad.

Mientras se hacen control de toda la region una mezcla tóxica de los grupos del crimen organizado, la pobreza cada vez mas incrementando, las instituciones débiles y corruptas, y las anárquicas fuerzas privadas de seguridad, los cuerpos de las mujeres se utilizan como campos de batalla en las guerras internas de control, recursos, y poder.  Por necesidad, las mujeres han tomado un papel principal luchando contra la impunidad y la corrupción mientras continua su sufrimiento de las amenazas, la intimidación, la violencia, y aún la muerte en represalias contra su trabajo.

Dado la relación estrecha entre los Estados Unidos, México, y las naciones de Centroamérica, es imprescindible que el apoyo bilateral a la región amplifica la seguridad de las mujeres para garantizar su seguridad a largo plazo y el estado de derecho.  En un momento cuando el gobierno de los Estados Unidos proporciona capacitación, equipo, y otro apoyo a las fuerzas de seguridad mexicanas y centroamericanas es cada vez más urgente  investigar cómo estas medidas reforzadas de seguridad han contribuido a la violencia contra las mujeres en esta región.  Le agradezco por su atención a este asunto muy importante, y por su apoyo a estas mujeres muy valerosas que arriesgan su vida en la búsqueda de la justicia y la democracia.

Muy sinceramente,

Raúl M. Grijalva

Miembro del Congreso