Washington, D. C. – Hoy, el diputado Raúl M. Grijalva pidió a la gobernadora de Arizona Jan Brewer vetar el proyecto de la ley inconstitucional anti-inmigrante aprobada recientemente por la legislatura estatal, destacando que de no hacerlo, dará lugar a severas sanciones económicas para el estado.
El proyecto de ley, SB 1070, forzara a las fuerzas policiales a detener y cuestionar a cualquier sospechoso de ser un inmigrante ilegal, incluye demandar documentos de verificación de ciudadanía estadounidense. El lenguaje de dicha legislación contradice el principio jurídico que sólo el gobierno federal debe establecer la póliza de inmigración. Escrito por el senador estatal Russell Pearce, el proyecto de ley ha sido denunciada por grupos religiosos, derechos civiles, organizaciones de inmigrantes e hispanos en todo el país, antes de venir a la mesa de la gobernadora.
“Este proyecto de ley será rechazado por los tribunales, y mientras tanto, Arizonenses serán sometido a la indignidad innecesarios a manos de una ley racista”, dijo Grijalva. “No puedo hacer suficiente hincapié ante la escala de daños hacia Arizona; el prestigio y credibilidad de Arizona sufrirá si esta ley es finalizada.”
Grijalva pidió a organizaciones nacionales de todo tipo que rechacen a Arizona como destino de convenciones a menos que el proyecto de ley sea vetada. Después de que el Estado se negara a reconocer el día de Martin Luther King Jr., la Asociación de Ligas de Jugadores de Fútbol Nacional prohibió el Super Bowl; esta prohibición logro cambiar el proyecto de ley en 1993.
“Si el estado sigue adelante con esto, el coste será alto”, dijo Grijalva. “Esta medida no se enfoca seriamente en la cuestión de inmigración. Es una grandilocuencia a costa del contribuyente. Convirtiendo a cada oficial policiaco en funcionario de inmigración, armado con un mandato de perfil racial, es anti-estadounidense y no podrá soportar ni siquiera el escrutinio legal casual.”