La versión en español está a continuación.

TUCSON, Ariz. – Today, Rep. Raúl M. Grijalva issued the following statement:

We cannot ignore the human tragedy and gruesome deaths of 50 migrants found in the back of tractor-trailer in San Antonio. How many more human rights cruelties will our nation endure before we finally address our broken immigration system? The mass deaths of migrants seeking refuge in our country, regardless of immigration status, is nothing less than a national tragedy. It’s ​a blatant reminder of the ​continued costs of militarized borders and xenophobic policies.

Forced migration will continue to be driven by poverty, violence, political persecution, and climate change. Programs ​like Remain in Mexico and Title 42 only force migrants to make unimaginable choices. ​Regrettably, thousands of migrants have suffered similar fates to those in Texas in years past in desperate attempts to flee their homes to seek the safety of our nation. Families ripped apart. Yet, we continue to do nothing to fix our ​immigration laws and little to address root causes.  Republicans in Congress have stood as a roadblock to fixing our broken system. Now it is time for Congress and the Biden administration to honor the memories of those who perished, their families and so many immigrants whose lives hinge on reforming our​ immigration system.  ​Those responsible for this latest tragedy must be held accountable and a full investigation must be completed. We must no longer be a nation that turns a blind eye on horrific human rights abuses enabled by our own failed policies.

en español

TUCSON, Ariz. – Hoy, el representante Raúl M. Grijalva emitió la declaración siguiente:  

No podemos ignorar la tragedia humana y muertes horribles de 50 migrantes que fueron encontrados en la parte trasera de un camión en San Antonio. ¿Cuántas crueldades más contra los derechos humanos soportará nuestra nación antes de que finalmente abordemos nuestro sistema de inmigración roto? Las muertes masivas de migrantes buscando refugio en nuestro país, sin importar estatus migratorio, es nada menos que una tragedia nacional. Es un recuerdo descarado de los costos continuos de fronteras militarizadas y políticas xenófobas.   La migración forzada seguirá siendo impulsada por la pobreza, violencia, persecución política, y el cambio climático. Programas como Permanecer en México y Título 42 solo obligan a los migrantes a tomar decisiones imaginables. Lamentablemente, miles de migrantes han sufrido destinos similares a los de Texas en años anteriores en intentos desesperados de huir sus hogares para buscar seguridad en nuestro país. Familias destrozadas. Sin embargo, seguimos sin hacer nada para arreglar nuestras leyes de inmigración y poco para abordar las causas raíz. Los republicanos en el congreso se han mantenido como un obstáculo para arreglar nuestro sistema roto, ahora es tiempo para que el congreso y la administración de Biden honren las memorias de los que perecieron, sus familias y tantos inmigrantes cuyas vidas giran en torno a reformar nuestro sistema de inmigración. Los responsables por esta última tragedia deben rendir cuentas y se debe completar una investigación completa. Ya no debemos ser una nación que hace la vista gorda ante los abusos de derechos humanos horríficos habilitados por nuestras propias políticas fallidas